¿Estás organizando un workshop próximamente pero te faltan ideas para animarlo? ¡Sigue leyendo! Organizar e impartir un workshop no es algo que se pueda improvisar, y requiere cierta preparación previa. Un workshop reunirá a varias personas para debatir sobre un mismo tema, por lo que es esencial saber moderarlo correctamente, pero también planificar actividades originales y relevantes para estimular el desarrollo del workshop.
Hemos reunido algunas ideas y consejos originales para ayudarte a encontrar las actividades perfectas para tu workshop.
Índice
1. ¿Qué es un workshop?
Un workshop es un taller colaborativo cuyo objetivo es debatir sobre un tema o asunto determinado y encontrar soluciones a los problemas definidos de antemano. Los principales objetivos de un workshop pueden variar en función del contexto. Puede tratarse de formar a los asistentes en nuevas competencias, estimular la creatividad y la innovación, resolver problemas concretos, fomentar la colaboración y el trabajo en equipo o compartir conocimientos y buenas prácticas. Los workshops suelen considerarse oportunidades de aprendizaje informal, en los que los participantes pueden interactuar de forma más dinámica y participativa que en los formatos de formación tradicionales.
Sin embargo, para captar la atención de los participantes y hacer que la experiencia sea memorable, es esencial ofrecer actividades de animación que sean atractivas e interactivas. Estas actividades se preparan con antelación, en función de los asistentes al workshop y de su perfil (cargo, responsabilidades, etc.).
2. Empieza por una ronda de presentación
En primer lugar, en cada workshop hay que presentar a los participantes, y muy a menudo se agradece una ronda de presentación, para poder dar más contexto. Un breve turno de palabra por participante, para romper el hielo, es una forma excelente de conocer al grupo y presentarse antes de entrar en materia. También puedes dedicar tiempo en este momento introductorio a que cada uno manifieste sus necesidades y expectativas para la sesión.
Esta breve introducción será muy útil para crear un clima de confianza, intimidad y comunicación entre todos los asistentes. Estas intervenciones iniciales sirven a los participantes como calentamiento, para ayudarles a superar la ansiedad que puede producirles hablar en público. Una vez hecho esto, presenta el workshop con el orden del día y los objetivos de la sesión.
3. Ofrece una sesión de coaching de grupo
La primera idea de animación para un workshop es una breve sesión de coaching en grupo.
Organiza una sesión de coaching en grupo en la que una persona, tú o un coach profesional, guíe a los participantes a través de ejercicios de reflexión, debates y actividades destinadas a mejorar sus competencias personales y profesionales. De este modo, los participantes podrán contar con apoyo y asesoramiento personalizados en un entorno de grupo. Antes del workshop, puedes preguntar a los participantes qué tema, habilidad o asunto de coaching les gustaría tratar, de forma que puedas organizar tu evento de la forma más eficaz posible.
4. Organizar un quiz interactivo
Incluye un quiz interactivo durante el workshop para poner a prueba los conocimientos de los participantes y mantener su implicación.
Utiliza herramientas online para crear encuestas y cuestionarios interactivos, y ofrece recompensas por las respuestas correctas (desayuno al día siguiente, etc.). El objetivo no es, por supuesto, evaluar a tus empleados, sino ofrecer un breve descanso con un divertido cuestionario relacionado con el workshop. Puedes utilizar la aplicación Kahoot o Google Survey, por ejemplo.
5. Prepara juegos de rol
Los juegos de rol son otra idea clásica, y que suele gustar mucho.
Son una forma excelente de fomentar la participación activa y mejorar las habilidades comunicativas de todos los participantes. Divide a los asistentes en grupos y asígnales roles específicos relacionados con el tema del workshop (un rol de cliente, un rol de ventas, un rol de experto en marketing, un rol de experto en negociación, etc.). Al pedirles que resuelvan problemas o simulen situaciones concretas, puedes fomentar el aprendizaje práctico y la colaboración entre los equipos. También en este caso, piensa de antemano en el tipo de juego de rol que quieres poner en práctica y el tiempo que quieres dedicarle durante el workshop.
6. Organiza workshops prácticos
Los talleres prácticos son no son lo mismo que los los juegos de rol y constituyen una forma original de organizar un workshop.
Céntrate en una habilidad, concepto o tema planteado durante el workshop y organizar un taller práctico en torno a este. Así, los participantes podrán aplicar inmediatamente lo aprendido, favoreciendo así el aprendizaje. Estos talleres les proporcionarán una experiencia concreta y reforzarán su comprensión del tema de forma interactiva y colaborativa. Asegúrate de proporcionar los recursos y herramientas necesarios para estas actividades (materiales, presentaciones, etc.). Incluso puedes combinar esta actividad con los quiz mencionados anteriormente en el artículo.
7. Crear un muro de ideas
¿Has pensado en crear un muro de ideas para tu workshop, para estimular la creatividad?
Crea un muro de ideas interactivo en el que los participantes puedan compartir sus reflexiones, ideas y sugerencias sobre un tema determinado (lanzamiento de un nuevo producto o servicio, optimización de una estrategia de marketing o ventas, plan de contratación original, etc.). Utiliza notas adhesivas, pizarras blancas o herramientas digitales para que todos puedan participar en el muro de ideas. Esta actividad promoverá la creatividad y fomentará la participación activa de todos los empleados, al tiempo que se avanza en un tema.
8. Planifica sesiones de networking
Si tu workshop reúne a personas de distintas empresas, con diferentes perfiles y puestos de trabajo, planifica sesiones de networking para facilitar la interacción entre los participantes.
Organiza debates en pequeños grupos, speed datings de negocios o actividades de creación de equipos para reforzar los vínculos y fomentar una posible colaboración futura. Esta actividad también puede organizarse al final del workshop, en torno a un cóctel, para crear un ambiente más distendido sin salirse del marco del workshop.
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